Casas con eficiencia energética, una necesidad

La eficiencia energética en una casa ha pasado de ser un lujo a una necesidad hoy en día, con muchos beneficios. El reto de la reducción en el impacto medioambiental es un tema de muchas mesas de trabajo tanto en España como en la Unión Europea. Por eso, muchos sectores, entre ellos el del ladrillo, se están adecuando a los nuevos requerimientos constructivos.

Eficiencia energética en los hogares

Podemos definir la eficiencia energética como el abastecimiento racional de energía para satisfacer necesidades como climatización, generación de agua caliente o iluminación de un hogar u oficina. Según datos estadísticos, la energía consumida en los edificios equivale a un 40 % del total de la demanda. Por eso, el enfoque de las autoridades en un mayor ahorro energético en el hogar es tan importante.

Los principios sobre los que se rige la eficiencia energética son tres:

• Reducción de la demanda: aplicación de medidas para lograr el objetivo y que impactan en fachadas, suelos, cubiertas, etc. El objetivo es la reducción del consumo sin afectar la temperatura interior.
• Uso de instalaciones con máxima eficiencia: al reducir la demanda, el uso racional y eficiente de las instalaciones se convierte en prioridad. Esto se realiza a través de medios y procesos mecánicos que limiten la pérdida energética.
• Satisfacer la demanda​ con energías renovables: después de reducir la demanda y usar racionalmente la energía, las energías renovables deben entonces satisfacer el nuevo escenario de consumo con un impacto mucho menor al medio ambiente.

¿Cómo lograr un hogar eficiente?

La eficiencia energética podría ahorrar hasta un 40 % del consumo medio de un edificio. ¿Cómo lograrlo? Por medio de mejoras que, en muchas ocasiones, podemos realizarlas nosotros mismos. Aquí dejamos algunas:

• Aislamiento: la instalación de ventanas dobles o con dobles cristales; el cierre de persianas y cortinas en la noche y otros ajustes son parte de esta fase.
• Protección de puertas y ventanas: se pueden utilizar láminas adhesivas de plástico para evitar que se pierda tanto el frío en verano como el calor en invierno.
• Grifos: en los baños, instalar grifos monomando en lugar de los independientes con agua caliente y fría, sistemas de doble pulsador para el sanitario o grifos inteligentes que se activan con movimiento pueden ser alternativas.
• Iluminación: aprovechamiento de la iluminación natural, pintura clara en las paredes para que se absorba mejor esa luminosidad e instalación de bombillas LED o de bajo consumo para un mejor rendimiento y ahorro energético son algunas de las ideas.
• Aire acondicionado: fijar una temperatura en 24 grados centígrados como mínimo. Aún así, sabemos que actualmente hay ciertas regulaciones climáticas para el ahorro energético. Esta limitación es de 27 grados. En cuanto a la ventilación, los toldos, cortinas y persianas ayudan a evitar que la vivienda se caliente. En verano es bueno abrir las ventanas a primera hora de la mañana para que se ventile correctamente la estancia.

Los hogares son de los mayores consumidores de energía. Buscar la eficiencia energética en ellos es tener muchos beneficios, ahorrar y ser nobles con el medioambiente.